Las políticas ambientales en tiempos de crisis

Desde su entrada en la Unión Europea en 1986 nuestro país ha realizado un considerable esfuerzo para incorporar la rigurosa legislación europea en materia de medio ambiente y mantenerla al día, debido a la intensa actividad de las instituciones europeas. Sin ir más lejos, la semana pasada el Parlamento aprobó nuevas directivas para la recogida y reciclado de aparatos tecnológicos.

Como consecuencia de estas exigencias que plantea Bruselas, se ha producido un importante desarrollo en las administraciones públicas encargadas de la gestión y control de estas políticas. También se ha desarrollado en paralelo un importante sector privado desde el que atendemos todos estos requisitos, alentado por las administraciones para conseguir generar empleo.

Sin embargo, la actual crisis económica y la necesidad de reducir el gasto público y mejorar la competitividad de las empresas, está relegando las políticas ambientales a un último puesto en el nivel de prioridades, relajándose en todos los casos su aplicación y cumplimiento.

Ante esta realidad no hay que olvidar que la aplicación de estas políticas responde a obligaciones y objetivos fijados por la Unión Europea, y su incumplimiento puede tener como consecuencia importantes sanciones ?más ahora que está en la presidencia del Consejo la primera ministra danesa, Helle Thorning-Schmidt , con el medio ambiente como una de sus máximas prioridades. Además, no se puede perder de vista otras consecuencias, como la aparición de demandas sociales reclamando el cumplimiento de dichas obligaciones o el propio requerimiento del sector ambiental. La aplicación de todas estas políticas necesita el control de las administraciones públicas para no desmoronarse.

Esta visión a corto plazo, de recorte de gastos aún a riesgo de incurrir en mayores costes futuros, hace que las Administraciones públicas se encuentren en un difícil momento para gestionar la legislación y mantener el nivel de calidad ambiental alcanzado. Por ello, las administraciones tienen un importante reto por delante para poder salvar esta situación.

(Entrada publicada en el blog del Centro de Innovación Pública del Instituto de Empresa)