Informe de la EEA sobre pérdida de recursos en la UE

La Agencia Europea de Medio Ambiente (EEA) ha publicado un interesante informe sobre pérdida de recursos en la gestión de residuos. Tal y como refleja este organismo de la Unión Europea en el documento, se pierden grandes fracciones de recursos valiosos durante la recogida de los residuos de aparatos eléctricos y electrónicos, baterías, textiles y plásticos debido a una gestión ineficiente, al comportamiento del consumidor y su falta de sensibilización, barreras tecnológicas, así como la naturaleza peligrosa de sus materiales y la complejidad del diseño.

Tal y como se puede ver en la imagen, la EEA destaca que en los RAEE se pierde el 60% de las más de 10 millones de toneladas generadas en la UE en 2015. En concreto 750.000 toneladas se depositan en el cubo de residuos urbanos, 2,2 millones de toneladas se recogen con la chatarra metálica, 950.000 toneladas se tratan en instalaciones que no cumplen los requisitos de tratamiento de RAEE, 750.000 toneladas son canibalizadas por sus componentes valiosos, y 1,5 millones de toneladas son exportadas.

Como consecuencia de esto, aumenta la extracción de materias primas y su posterior agotamiento, lo que plantea riesgos considerables para el medio ambiente y la salud humana en términos de contaminación del aire, agua y suelo, cambio climático y pérdida de biodiversidad.

Y en el caso de las baterías usadas, según Eurostat, se generan más de 1,9 millones de toneladas al año y se espera que la cantidad aumente en el futuro. Este residuo contiene una amplia variedad de materiales, como metales, materias primas críticas y sustancias peligrosas. Cabe destacar que, en el caso de las baterías portátiles, solo se recupera un 46% de las mismas frente al 99% que se recupera en el caso de las baterías de plomo ácido. Por lo tanto, las tasas de recogida y reciclaje, la rentabilidad del reciclaje y los impactos sobre el medio ambiente y la salud dependen en gran medida del tipo de batería. La recuperación de materiales de las baterías está impulsada tanto por las políticas de residuos como por el valor económico de los materiales.

La razones para la pérdida del 54% de los residuos baterías portátiles son: la mezcla con el residuo urbano, la acumulación en los domicilios y la pérdida con los RAEE.

Desde ASEGRE aprovechamos para recordar que las obligaciones en materia de RAEE existen desde hace 15 años. Sin embargo, seguimos encontrando problemas como robos de residuos y canibalizaciones. Según un estudio de la European Electronics Recyclers Association (EERA) esto ocurre en promedio para el 22% de RAEE en la UE y para 2/3 de los equipos de intercambio de temperatura, produciendo un importante daño ambiental. El valor total de lo canibalizado es de 170 millones de euros, dinero que no percibe el reciclador, que es quien trata adecuadamente los residuos, dispone de las plantas, paga impuestos y crea empleo.

Es necesario revertir esta situación para que la UE avance verdaderamente hacia una economía circular.